El Gingko Biloba es un árbol con 250 millones de años de antigüedad cuyas hojas poseen un extraordinario poder curativo. Considerado un árbol sagrado porque favorece la longevidad, el gingko biloba, una de las especies más antiguas que habitan sobre la tierra, es uno de los mejores aliados para mantener el cerebro y la mente en plena forma, incluso en edades avanzadas. Dado que es un efectivo vasodilatador, está indicado en los casos de varices, úlceras varicosas y como terapia preventiva de las afecciones vasculares de la diabetes de hecho es la base para la elaboración de nuestro producto exclusivo FISIOCOLD además potencia la microcirculación, tanto a nivel cerebral como a nivel periférico.
Como tópico favorece el tratamiento de la piel seca, pues estimula la secreción sebácea. Se prescribe en los tratamientos de insuficiencia vascular senil, artereoesclerosis y sus síntomas, ( vértigo, pérdida de memoria o alteraciones del equilibrio). Algunos facultativos lo aconsejan preventivamente para las embolias cerebrales y la enfermedad de Alzheimer. En Japón se receta para tratar diversos trastornos específicamente femeninos, como el síndrome premenstrual, la infertilidad, las deficiencias en la lactancia y la menopausia La medicina china tradicional prescribe gingko para enfermedades como el asma, la tos, las inflamaciones alérgicas agudas o los problemas auditivos. Sus hojas secas preservan el ritmo y la energía del músculo cardíaco a la vez que sirven para combatir la diarrea.